Publicado por Luis Marín
“Vino el vértigo, volvieron los círculos, y furioso, lancé un golpe que rompió el espejo, dejándome la mano ensangrentada.” –La Tumba-
De pronto me dieron unas ganas locas de ponerme a fumar. Eran las once de la noche del domingo. Lloraba. Pensaba que tal vez todo era el resultado de un macabro y pequeño mal entendido que por obra y gracia de nosotros mismos fue creciendo de un modo exagerado y acelerado hasta terminar en catástrofe. Y heme aquí, buscando un cigarro para ponerme a fumar.
Encontré uno, y encontré vodka. Fumé y bebí y lloré sólo en casa, hasta que no pude más. Me encerré en el baño yo solo, para no levantar sospechas. Ahí, en una esquina fría y a oscuras, sólo, me encontré con mi otro ser, que conocí vez anterior en una meditación, y en el trance y la locura entendí todo:
-¿Qué es lo que sabes de él?- pregunté
-Solo lo necesario: es un chico que se sienta a las once de la noche en la esquina del baño a fumar, beber y llorar sólo…-me contestó
-Pero… ¿y qué sabes de ella?- volví a preguntar
-Lo mismo que sabes tú, sé yo… ¡Nada!
No sabía nada, excepto que no la he vuelto a ver, no le he vuelto a llamar, no la he vuelto a tocar, porque así me lo pidió.
-¿Te importa mucho?- ahora él me preguntó
-La extraño…- me limité a decir
-Pero te importa…
-Sí
-¿Mucho?
-Tal vez
Me levanté a prender la luz, y no vi nada. Tenía muy cerca el retrete para ponerme a vomitar todo lo que ahí sentía. Me miré en el espejo… era un ser diferente a mí, era otro yo. Exhalé la última bocanada de humo contra el cristal del espejo.
-Sí, sí me importa, y mucho…
-Ya lo sé- me dijo
Y volví a apagar la luz.
Mi querido Luis! Mucho animo y un gran abrazo. Me gustan tus escritos y lo sabes.
ResponderEliminarTe quiero mucho.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola Luis tienes unos textos escritos maravillosos y reflexivos Saludos 😉😉
ResponderEliminarHola Luis tienes unos textos escritos maravillosos y reflexivos Saludos 😉😉
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