martes, 10 de noviembre de 2009

No me culpes.

Publicado por Luis


No me culpes si después de todo lo que ha pasado aun dudo de mi capacidad para afrontarte de frente. No me culpes si aun a estas alturas le temo al futuro. No me culpes si los sueños vuelan alto sin estar fijos a tu alma. No me culpes si el pasado me dejó marcado para siempre y no puedo quererte entero. No me culpes si el temor de vez en cuando se hace presente en mis ojos. No me culpes si te quiero tanto… en tan poco tiempo.

No me culpes que haya renunciado a todo, a otros amores, a otros sentimientos, a la vida misma… por ti. Porque a pesar de todo no me arrepiento de nada, y no me culpo yo a mi, que de tantas elecciones he escogido la mejor. Ahora le pregunto al cielo ¿Cuánto me debía el destino… que contigo me vino a pagar?

No me culpes si mi enclenque mente es incapaz de diferenciar entre lo que es amar y querer. Disculpa, no me culpes, si ambas cosas parecen tan similares en mi cabeza. Disculpa si te he llegado a querer tanto en tan poco tiempo, disculpa mi atrevimiento.

Y si mañana no te digo que te quiero, es porque prefiero demostrarlo. Y si mañana se me olvida demostrarlo, nunca olvides que algún día dije… “te quiero” No me culpes si te quiero, no me culpes a pesar de todo.

No me culpes si los sueños vuelan alto y caen al abismo de tu espalda. No me culpes si el deseo está ausente en mi mirada, que con morbo es imposible ver a Venus. No me culpes si eres arte y yo el artista, no me culpes si te desnudo con la vista, que cada rincón de tu alma está presente en mi mirada a pesar de no haberlo visto nunca. No me culpes si el alma ruega por tus besos cada noche, y le doy de cenar de mis reproches, que cada vez que te recuerdo solo encuentro soledad entre mi cama.

No me culpes si el alma, dentro de mi ser, clama por tu mirada y por tu aliento, no me culpes si mañana te robo un beso, porque el público es ingrato y no nos deja nunca solos. No me culpes si el vino se acaba en la botella, no me culpes si el mismo me gusta más desde tu boca. No me culpes.

Pero no me culpes, amor mío, ahora, porque tal vez llegue el día en que lo hagas, pero el día que me culpes, recuerda, alma…

Que ambos fuimos culpables del amor que profesamos, y que entre silencio y soledad compartimos en la luna los secretos de la vida… y que cada beso sabía a miel y a mantequilla.

Colgado de la luna estoy por ti... Espero te des cuenta...
 
Y No me culpes.

1 comentario:

  1. Jajaja, todos se cuentan todo a mis espaldas ¬¬
    Pero bien... a mí también me agradó que nos presentaran. Jajaja, de todas las veces que te vi pasar por la escuela jamás me imaginé que escribieras tan chido. Este post en especial, le conté a Diana (y ella te contó a ti¬¬) que lo ví y me gustó un buen. No inventes, hombre.
    Qué bonita forma de expresarte. ¿Eh? :D
    Me alegro que la Diana y tú se hayan encontrado, ahora sí, me la tratas bien o te pego. ;) Jajaja, creo que esas amenazas no son necesarias, pero quería hacerlo. MUAJAJA.
    Ay ya pues, me estoy poniendo sin sentido.
    So me paso a retirar. Cuídese. Nos estamos viendo(;

    ResponderEliminar